Salud |
Un estudio en ratones desvela cómo el llanto del bebé afecta las hormonas maternas
En un nuevo estudio en ratones, se explica cómo el llanto del bebé activa las células cerebrales maternas para aumentar la liberación de oxitocina, una hormona que estimula el vínculo afectivo entre la madre y el bebé.
En los resultados, se ofrece una explicación biológica de cómo las señales sensoriales de un bebé pueden ayudar a fomentar el comportamiento materno.
La oxitocina desempeña un papel clave en el parto y la lactancia. También actúa en el cerebro, lo que favorece el comportamiento maternal y el vínculo afectivo entre la madre y el bebé.
Cuando las madres primerizas oyen el llanto de un bebé (una señal de angustia), sus niveles de oxitocina pueden elevarse y estimular comportamientos maternales reconfortantes.
En el estudio actual, los científicos utilizaron ratones para comprender mejor el proceso biológico por el que el llanto del bebé influye en los niveles de oxitocina y ayuda a determinar el comportamiento materno.
Las neuronas del hipotálamo, la parte del cerebro que controla las emociones, liberan oxitocina.
Los científicos descubrieron que los llantos de las crías de ratón provocaban un aumento sostenido de la activación de las neuronas que producen oxitocina (el proceso por el que las neuronas se comunican entre sí) en el cerebro de las ratonas progenitoras.
Las neuronas de oxitocina no respondían a sonidos de frecuencia única ni a los llantos de ratones adultos.
En otros experimentos, se descubrió que el efecto de los llantos de las crías sobre las neuronas que producen oxitocina depende del tálamo intralaminar posterior, una parte del cerebro que procesa la información sensorial.
La estimulación constante del tálamo mediante el llanto de varias crías redujo la inhibición de las neuronas que producen oxitocina en el hipotálamo.
El subsiguiente aumento de la activación de las neuronas que producen oxitocina generó la liberación de oxitocina en otras áreas del cerebro que controlan las respuestas maternas, incluida la recogida de la cría, acción que se produce cuando una ratona progenitora se acerca a una cría angustiada, la recoge y la lleva de vuelta a su nido.
El estudio aporta datos clave sobre cómo las señales sensoriales de un bebé afectan las hormonas maternas y estimulan los comportamientos de crianza. (Institutos Nacionales de Salud)