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Un estudio sugiere que el llanto de los bebés puede predecir futuros problemas de desarrollo
Un estudio financiado por los Institutos Nacionales de la Salud sugiere que las características del llanto de los bebés prematuros pueden ayudar a predecir el riesgo de padecer problemas de desarrollo y de comportamiento a largo plazo. Los hallazgos pueden conducir a herramientas para identificar a bebés con alto riesgo de padecer tales problemas, lo que coadyuvará a los esfuerzos de prevención o de tratamiento temprano.
Un estudio sugiere que el llanto de los bebés puede predecir futuros problemas de desarrollo. Foto: Toa Heftiba/Unsplash
El estudio de 363 bebés prematuros fue financiado por el Instituto Nacional de Salud Infantil y Desarrollo Humano Eunice Kennedy Shriver de los NIH y dirigido por el Dr. Barry M. Lester del Hospital de Mujeres y Niños de Rhode Island en Providence.
Los avances científicos han incrementado considerablemente la supervivencia de bebés nacidos antes de las 30 semanas de embarazo.
Sin embargo, estos bebés muy prematuros aún corren un alto riesgo de presentar retrasos en el desarrollo de las habilidades motoras, cognitivas y del lenguaje; así como problemas de comportamiento.
La capacidad de detectar a los bebés con un mayor riesgo de sufrir trastornos de desarrollo y de comportamiento podría ayudar a guiar el trabajo para identificar intervenciones tempranas adecuadas.
El llanto anormal de los recién nacidos se ha relacionado con problemas médicos graves que afectan el cerebro, lo que plantea la posibilidad de que las características del llanto pueden servir para medir la salud del cerebro y del sistema nervioso. Sin embargo, la mayoría de los estudios han examinado un número limitado de características del llanto y no han evaluado los resultados sobre la salud a largo plazo.
En el estudio actual, los investigadores registraron el llanto de bebés prematuros, nacidos aproximadamente a las 27 semanas de embarazo, durante la semana del alta de las unidades de cuidados intensivos neonatales en nueve centros médicos académicos de los Estados Unidos.
Utilizaron inteligencia artificial para analizar numerosas características acústicas del llanto de los bebés, desde el volumen y el tono hasta cómo se altera el sonido por la constricción del tracto vocal.
Alrededor de los dos años, los participantes del estudio fueron sometidos a pruebas para evaluar su progreso de desarrollo; y los padres completaron cuestionarios para evaluar el comportamiento de sus hijos y el riesgo de trastorno del espectro autista.
El análisis computacional de los investigadores relacionó las características acústicas del llanto de los recién nacidos con los déficits cognitivos y de lenguaje, los problemas de comportamiento, y un resultado positivo en una prueba de autismo a la edad de dos años. Un resultado positivo puede indicar un mayor riesgo de sufrir problemas de desarrollo en el futuro.
El trabajo plantea la posibilidad de que el análisis del llanto de los bebés pueda convertirse en una herramienta de cabecera para detectar a niños con un alto riesgo de padecer ciertos trastornos de desarrollo y de comportamiento.
Si se validan en un estudio más grande con una población infantil más diversa, los hallazgos pueden ayudar a identificar estrategias para mitigar los impactos negativos de tales trastornos. (Institutos Nacionales de la Salud)
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