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Síndrome de intestino irritable en niños
El síndrome de intestino irritable (SII) es un grupo de síntomas que se presentan juntos e incluyen dolor frecuente en el abdomen y cambios en la defecación como diarrea, estreñimiento o ambos. Un niño con SII tiene estos síntomas sin señales o daños visibles o enfermedad en el aparato digestivo.
El SII es un trastorno gastrointestinal funcional. Los trastornos gastrointestinales funcionales, que los médicos llaman ahora trastornos o interacciones cerebro-intestino, están relacionados con problemas en la manera en que el cerebro y el intestino trabajan juntos. Estos problemas pueden hacer que el intestino sea más sensible y cambiar la forma en que se contraen los músculos intestinales. Si los intestinos del niño son más sensibles, el niño puede sentir más dolor abdominal. Los cambios en la forma en que el intestino se contrae causan diarrea, estreñimiento o ambos.
¿Tiene otro nombre el síndrome de intestino irritable o SII?
En el pasado, los médicos se referían al SII como colitis, colitis mucosa, colon espástico, colon nervioso e intestino espástico.
¿Hay diferentes tipos de SII en niños?
Los expertos han definido cuatro tipos de SII en niños. Cada tipo tiene un patrón diferente de cambios en la defecación o deposiciones anormales. Saber qué tipo de SII tiene un niño puede ayudar al médico a tratar sus síntomas.
SII con estreñimiento (SII-E)
En el SII-E, más de un cuarto de las heces son duras o grumosas y menos de un cuarto son flojas o acuosas.
SII con diarrea (SII-D)
En el SII-D, más de un cuarto de las heces son flojas o acuosas y menos de un cuarto son duras y grumosas.
SII con hábitos intestinales mixtos (SII-M)
En el SII-M, más de un cuarto de las heces son duras o grumosas y más de un cuarto son flojas o acuosas.
SII sin subtipos definidos (SII-I)
En el SII-I, menos de un cuarto de las heces son duras o grumosas y menos de un cuarto son flojas o acuosas.
¿Cuán común es el SII en niños?
Los estudios sugieren que cerca del 5 por ciento de los niños entre 4 y 18 años tienen SII.
¿Cuáles niños tienen más probabilidad de desarrollar SII?
El SII es más común en niños que tienen antecedentes de:
• infecciones bacterianas en el aparato digestivo
• ciertos problemas emocionales o de salud mental como estrés, depresión y ansiedad
• eventos cuando son recién nacidos o en la infancia temprana que causan dolor o inflamación, como alergias, infecciones o cirugía
• maltrato infantil
• miembros de la familia con SII
¿Cuáles son los síntomas del SII en niños?
En niños con síndrome de intestino irritable, los síntomas más comunes son:
• dolor abdominal, a menudo relacionado con la defecación
• cambios en la defecación como diarrea, estreñimiento, o ambos, dependiendo del tipo del SII que tenga el niño
Otros síntomas del SII en niños podrían incluir:
• la sensación de no haber terminado de defecar
• mucosidad en las heces
• distensión abdominal
El SII puede ser doloroso, pero no causa otros problemas de salud ni daña el aparato digestivo.
Con el fin de diagnosticar el SII, el médico buscará un patrón determinado en los síntomas del niño durante un cierto tiempo. El SII es un trastorno crónico, lo cual significa que dura mucho tiempo, a menudo años. Sin embargo, los síntomas pueden ir y venir.
¿Qué causa el SII en niños?
Los médicos no están seguros de qué causa el SII en niños. Los expertos creen que una combinación de problemas podría causar el SII. Diversos factores pueden causar el SII en diferentes niños.
Los trastornos gastrointestinales funcionales como el SII son problemas con una interacción cerebro-intestino, es decir, la forma en que el cerebro y el intestino trabajan juntos. Los expertos creen que los problemas con la interacción cerebro-intestino podrían afectar la forma en que el organismo funciona y ocasionar los síntomas del SII. Por ejemplo, algunos niños con SII pueden sentir dolor cuando tienen una cantidad normal de gas o heces en el intestino. En algunos niños, es posible que la comida se mueva muy lentamente a través del aparato digestivo.
Ciertos problemas—como las infecciones bacterianas en el aparato digestivo, los problemas emocionales y de salud mental, ciertos eventos de la temprana edad que pueden causar estrés o inflamación y el maltrato infantil—son más comunes en niños con SII. Los expertos piensan que estos problemas podrían tener un papel en la causa del SII. Los cambios en el microbioma (las bacterias en el aparato digestivo que ayudan en la digestión) pueden también tener un papel.
Las investigaciones sugieren que ciertos genes podrían hacer que algunos niños tengan más probabilidad de desarrollar SII.
¿Cómo diagnostican los médicos el SII en niños?
Para diagnosticar el síndrome de intestino irritable, los médicos revisan los síntomas del niño y cualquier historia clínica y familiar, además de hacer un examen físico. En algunos casos, pueden pedir exámenes para descartar otros problemas de salud.
Revisión de los síntomas del niño
El médico podría preguntar sobre los síntomas del niño y buscar en ellos un patrón determinado para diagnosticar el SII.
El médico podría diagnosticar SII si el niño tiene dolor abdominal al menos cuatro días al mes, junto con uno o más de los siguientes síntomas:
• dolor relacionado con la defecación. Por ejemplo, el dolor podría mejorar o empeorar después de defecar.
• un cambio en la frecuencia de evacuaciones del niño.
• un cambio en la apariencia de las heces.
El médico podría diagnosticar SII si:
• el niño ha tenido síntomas al menos por dos meses
• los síntomas del niño no se pueden explicar del todo con otro problema de salud
Si un niño tiene dolor abdominal y estreñimiento, el médico podría hacer preguntas para saber si el dolor está relacionado con el estreñimiento. Si el dolor abdominal desaparece cuando pasa el estreñimiento, el niño podría tener un trastorno gastrointestinal funcional, conocido como estreñimiento funcional, en vez de SII.
El médico podría preguntar acerca de los síntomas que pudieran indicar si el niño tiene otro problema de salud en vez del SII. Estos síntomas incluyen:
• artritis
• sangrado rectal, heces con sangre o heces que son negras y alquitranadas
• enfermedad en los tejidos alrededor del recto
• diarrea nocturna
• dolor persistente en el lado superior o inferior derecho del abdomen
• vómito persistente
• problemas o dolor al tragar
• fiebre inexplicable
• adelgazamiento, retraso en el crecimiento o pubertad retardada
Historia clínica y familiar
El médico preguntará sobre factores que afectan al niño como:
• dieta y alimentos que podrían estar relacionados con los síntomas
• historia de problemas emocionales o de salud mental
• historia de problemas de salud distintos del SII que podrían estar causando los síntomas del niño
medicamentos
• infecciones recientes
• eventos estresantes relacionados con el comienzo de los síntomas
El médico preguntará también sobre los antecedentes familiares del SII y enfermedades y trastornos digestivos, como enfermedad celíaca, enfermedad intestinal inflamatoria, o úlcera péptica.
Examen físico
Durante un examen físico, el médico del niño por lo general:
• busca protuberancias o inflamaciones en el abdomen
• controla la estatura y el peso
• examina el cuerpo del niño en busca de señales de problemas de salud distintos del SII
• escucha con el estetoscopio los sonidos en el abdomen
• palpa el abdomen en busca de sitios sensibles o dolorosos
¿Qué exámenes usan los médicos para diagnosticar el SII en niños?
El médico podría pedir exámenes de sangre, exámenes de material fecal y otros exámenes para descartar problemas de salud distintos del SII que pudieran estar causando los síntomas del niño.
Examen de sangre
Un profesional de atención médica tomará una muestra de sangre y la enviará al laboratorio. Los médicos usan los exámenes de sangre para buscar enfermedades distintas del SII, incluidas anemia, infección y enfermedades digestivas.
Examen de materia fecal
El médico le dará al niño o al cuidador un recipiente para recolectar una muestra de materia fecal, con instrucciones de adónde enviarlo o llevarlo para las pruebas. Los médicos usan los exámenes de materia fecal para buscar sangre en las heces u otras señales de infecciones o enfermedades. El médico podría también hacer un examen rectal, a veces durante el examen físico, para verificar si hay estreñimiento, sensibilidad en el recto y otros problemas.
Otros exámenes
El médico podría efectuar otros exámenes para descartar problemas de salud que causen síntomas similares a los del SII. El médico decidirá si el niño necesita otros exámenes, dependiendo de:
• los resultados de los exámenes de sangre y materia fecal
• los antecedentes familiares de enfermedades digestivas
• los síntomas que pudieran ser señales de otra afección o enfermedad
Otros exámenes podrían incluir:
• pruebas de diagnóstico por la imagen, como una ecografía abdominal
• endoscopia de la parte superior del aparato digestivo con una biopsia para descartar enfermedad celíaca u otros problemas en la parte superior del aparato digestivo
• colonoscopia para descartar problemas en la parte inferior del aparato digestivo, como enfermedad intestinal inflamatoria
¿Cómo tratan los médicos el SII en niños?
Los médicos pueden tratar el síndrome de intestino irritable en niños recomendando cambios en la alimentación, terapias de salud mental, probióticos y medicamentos. Es posible que sea necesario probar varios tratamientos para ver cuál funciona mejor. El pediatra puede ayudarle a encontrar el plan de tratamiento adecuado.
Si el niño tiene dolor en el abdomen y estreñimiento, el médico podría primero recomendarle tratamientos para el estreñimiento. Si el dolor abdominal desaparece una vez tratado el estreñimiento, el niño podría tener un trastorno gastrointestinal funcional, conocido como estreñimiento funcional, en vez del SII.
Cambios en la alimentación
El pediatra o la dietista pueden ayudarle a planear una dieta balanceada. Obtenga información adicional sobre la alimentación, dieta y nutrición para el SII.
Terapias de salud mental
Las terapias de salud mental pueden mejorar los síntomas del SII, ayudar a los niños a afrontarlos y evitar que interfieran con la escuela y otras actividades. Las terapias que el médico podría recomendar para niños con SII incluyen:
• terapia de conducta cognitiva, la cual se enfoca en ayudar a cambiar los patrones de pensamiento y comportamiento
• hipnoterapia dirigida al intestino, donde un terapeuta utiliza la hipnosis, un estado de trance, para relajar o enfocar al niño
Probióticos
El pediatra podría recomendar probióticos para ayudar a tratar los síntomas del SII. Los probióticos son microorganismos vivos, con frecuencia bacterias, similares a los microorganismos que se encuentran normalmente en el aparato digestivo. Los investigadores todavía están estudiando el uso de probióticos para tratar el SII.
Para estar seguro, consulte con el pediatra antes de usar probióticos o cualquier otra medicina o práctica complementaria o alternativa. Si le recomienda los probióticos, pregúntele qué cantidad debe darle al niño y con qué frecuencia.
Medicamentos
En ciertos casos, el médico podría recomendar medicamentos que ayuden a aliviar los síntomas del SII. No le dé al niño sus medicamentos para tratar el SII a menos que el pediatra le diga que lo haga. El tipo de medicamento que el médico recomiende dependerá de los síntomas del niño. Los medicamentos recomendados podrían incluir:
• antidepresivos
• antiespasmódicos
• cápsulas recubiertas de aceite de menta
• suplementos con fibra
¿Podrían los cambios en la alimentación ayudar a tratar los síntomas del SII?
En algunos casos, los médicos podrían recomendar cambios en la alimentación para ayudar a tratar los síntomas del SII. Consulte con el pediatra sobre la dieta del niño y dígale cuáles alimentos cree usted que podrían estar relacionados con los síntomas del SII. El médico podría remitir el niño a una dietista.
Las investigaciones sugieren que algunos niños con SII pueden beneficiarse al reducir la cantidad de carbohidratos de difícil digestión (FODMAP) en su dieta. Los médicos o dietistas podrían recomendar una dieta baja en FODMAP para algunos niños con SII. Con los consejos de un médico o dietista, el niño comería menos alimentos que contienen FODMAP por un corto tiempo y luego podría ir agregando de nuevo gradualmente esos alimentos a su dieta.
Consulte con el pediatra o la dietista antes de hacer cambios en la dieta del niño para tratar de manejar los síntomas del SII. Una nutrición apropiada es importante para su crecimiento y desarrollo. Los profesionales capacitados pueden ayudarles a usted y al niño a planear una dieta bien balanceada para mantener hábitos de alimentación saludables. (Institutos Nacionales de la Salud)